En dos artículos anteriores tuve la oportunidad, gracias a la creación de un hipotético «un mini unicornio verde de pelo duro», de cuestionar el valor de ciertos descubrimientos e incluso de la evolución de la ciencia, que sigue siendo la referencia.

En estos tiempos extremadamente convulsos, hemos entrado en un ciclo donde la duda es la regla: las referencias aproximadas, las adaptaciones intencionadas, los argumentos sacados de contexto, las «verdades alternativas», los fake news forman parte de nuestro día a día.

Las redes sociales nos inundan de informaciones que, si no tenemos cuidado, nos impide tomarnos el tiempo de analizarlas.

Ya no entramos en un periodo de información, sino de «formateo» cuya situación se agrava cada día, por las redes sociales.

En nuestra profesión de fisioterapeutas, a menudo nos enfrentamos a métodos de enseñanza piramidales, desde el principio de nuestra formación: el profesor tiene la verdad y, para obtener nuestro diploma, debemos reproducirla fielmente.

Este comportamiento podría clasificarse como una «tendencia pavloviana».

Por el contrario, la enseñanza constructivista tiene en cuenta el nivel y bagaje de cada persona, su sensibilidad y el entorno en el que vive, física e intelectualmente. En este caso, la enseñanza se adapta constantemente a la capacidad de acompañamiento, aceptación y crítica de los destinatarios.

Así, nos encontramos en un sistema que puede considerarse horizontal, modulable y adaptado al ritmo de evolución y a la inteligencia de cada alumno.

Esta teoría constructivista fue desarrollada por el suizo Jean Piaget a principios de la década de 1920. Vygotski, Peter L. Berger e Thomas Luckmann, entre otros, también participaron a esa evolución. Sin entrar en argumentos filosóficos, que están mucho más allá de nuestra competencia, nos es posible afirmar que la enseñanza de la Reeducación Postural Global- RPG® forma parte claramente del modelo constructivista de enseñanza. Esta es probablemente la razón por la que, desde el principio del método, se ha utilizado la palabra «colegialidad».

Mario Korell, responsable de la enseñanza del método en los países latinoamericanos de habla hispana, y que ha recibido una amplia formación en pedagogía constructivista, ha reforzado esta dirección, humanista, del aprendizaje.

Así que el escurridizo mini-unicornio verde de pelo duro tiene una brújula.

Sin embargo, este instrumento es de utilización delicada. Depende de las variaciones del medio ambiente y de las capacidades de adaptación de quien lo utiliza.

Necesita ser regulado a cada instante, en función de las circunstancias, gracias a un trabajo objetivo, teórico y práctico, según las inspiraciones de cada uno, los intercambios, la mejora de sus tratamientos y la evolución de las ciencias, sobre las que debe emitir un juicio.

Cuando un desvío se propaga en las comunidades, cualesquiera que sean, conocemos muy bien las dramáticas consecuencias, es decir, los conflictos.

Ph. E. SOUCHARD. Mayo 2024